La autopromoción es imperativa a la hora de emprender. Que somos nuestra propia marca ya lo sabemos. Que tenemos que recurrir al marketing de guerrillas para hacernos un hueco también. Muchas tareas y mucha presión nos acechan. Sin embargo, tenemos que sacar pecho por encima de todo. Nos creemos que nuestra idea funciona y que nuestro proyecto es un éxito. Tenemos que demostrarlo. ¿De qué sirve ponernos guapos si nadie nos mira? Esto va de lo mismo. No somos muy proclives a los post de auto-motivación, pero es que no nos queda otra. Seis técnicas básicas para comunicar al mundo que eres el mejor a continuación. Sois bienvenidos.
1. Identifica qué has hecho y en qué eres bueno.
Haz una lista de las metas que has alcanzado. Eso será lo que llamamos mapa del desempeño y servirá para demostrar al mundo lo lejos que has llegado ya. Nos han educado para ser modestos y sólo nos pronunciamos cuando alcanzamos la meta final. Eso no está mal, pero al final de una dura jornada tenemos que celebrar esas pequeñas batallas que hayamos ganado. Y entonces lo publicaremos en Twitter.
2. Practica la comunicación.
Tampoco es plan ir diciendo al mundo lo bien que lo hacemos de forma destacada. Utiliza los términos “Somos apasionados”, “hemos trabajado duro”, “hemos conseguido”, etc. Tus usuarios responderán a tu esfuerzo y entusiasmo, no a tu chulería.
3. Díselo a todo el mundo.
Trabajas mil horas al día en tu proyecto, ¿No te has ganado el derecho a decírselo al mundo? Comparte con todos quién eres y las cosas que haces.
4. Estate siempre preparado para demostrarlo.
Ahora que le has dicho al mundo lo que haces y de qué va tu marca, tienes que demostrarlo con pruebas contundentes. No hay mejor prueba que tu propio trabajo. Para ello actualiza tu Web y tus redes sociales constantemente.
5. Tú eres el protagonista.
Sé innovador a la hora de promocionarte a ti mismo. Hemos visto casos curiosos. Por ejemplo Philippe Dubost publicó su cv en un anuncio de Amazon. Recibió cien ofertas de empleo el primer día.
6. Sé generoso.
Es clave no parecer que siempre estás con las garras en alto. Promueve y anima a los que están haciendo un buen trabajo y ofrece tu ayuda cuando te la estén solicitando. La generosidad es la forma más sincera de ser recordado. No hay mejor manera de demostrar que eres un apasionado que siendo generoso.
Fuente: http://www.entresocios.es/
